Por fin mi alma
encontró el alma
que tanto anhelaba.
Un alma que baila con la mía
la más increíble melodía.
Escrita con las notas
de los más tiernos sentimientos,
donde los silencios
adivinan las más sublimes emociones,
siguiendo el compás de la vida
con los acordes de la felicidad.
Danza íntima,intensa,sin fin,
iluminada por las miradas del deseo,
donde las caricias graban la letra
en el pentagrama de nuestra piel,
para que suene eternamente la música
en esa nube que es nuestro hogar.
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